Búsqueda de fragancias que caracolean en el tiempo de sonrisas que anidan esperanzas...del lenguaje que dé solidez al verso y la prosa...de entregas, silencios y de una mística en la belleza, que resuman dignidad y respeto a la palabra.

Beatriz Mattar de Vergara

viernes, 7 de marzo de 2014

Alma y Adriana


AUSENCIA


Resbalan ardientes
las húmedas migajas residuales
de mi pena por tu ausencia

Mi pena…
Tenaz, constante,
desbarata mis sueños,
diluye mis esperanzas,
lastima, horada
mi alma vulnerable

Mi pena…
Sólo el tiempo
en su eterno devenir
podría atenuarla,
mitigando su furia,
poniendo sobre ella
una pátina de olvido.
Sólo el tiempo es mi aliado,
yo confío y espero…

Pero si me es esquivo
y no llega el consuelo,
emprenderé mi viaje,
enmarañada en la tristeza
que me dejó tu ausencia.

Alma Carrión de Dal Bó

 

 

YA NO…
      
No estás, no estás…
Ya no sangra la herida.
Todo lo cura el tiempo,
todo lo borra.
Cómplice silencioso de mis células
que en vano intentan
retener un retazo de aquel tiempo.
Mi boca ya no puede recordar
el sabor de tus labios.
Mi piel ha olvidado el calor de la tuya.
Conservo aún el gesto tierno,
(el amor después del amor),
recostada en el hueco de tu hombro,
tu mano acomodaba mi pelo,
despejando el rostro.
Y tu olor-sudor mezclado con el mío.
Tus dedos.
Las yemas de tus dedos
en mi espalda.
El amor después del amor…
¿Cuánto tardará mi piel en traicionarme
y borrar también esos recuerdos?

Adriana Mónica Roelofs