Búsqueda de fragancias que caracolean en el tiempo de sonrisas que anidan esperanzas...del lenguaje que dé solidez al verso y la prosa...de entregas, silencios y de una mística en la belleza, que resuman dignidad y respeto a la palabra.

Beatriz Mattar de Vergara

lunes, 29 de junio de 2015

"La importancia de la palabra"


ADIOS AMOR

Se esfumó en el aire como flecha,
destrozó mi corazón con el desgarro,
se quemó el amor
perdura el humo.
Ese lazo tierno que ensamblaba
audacia y placer.
Almas y cuerpos en un solo ferviente
latir desesperado.
Solo quedaron cenizas esparcidas,
leños caídos entiznados.
¿Dónde irá el amor cuando se apaga?
¿Llegará a destinos estelares?
¿Se injertará de nuevo?
¿Y en corazones menos doloridos
brotará como retoño fecundado?

Inés Quilez de Monge

Mención de Honor Género Poesía
XLVI  Concurso Internacional
Instituto Cultural Latinoamericano
“La importancia de la Palabra
Junín (Bs.As.), Junio de 2015


A MEJOR VIDA

         De pronto, aquel amor a espaldas del sol se tornó noche oscura. Más que siempre, como nunca antes…
         La joven mujer llora a escondidas. Aquel hombre, el que despertó todos sus sentidos, el que le dio vida a su cuerpo adormilado, el que le arrancó la timidez de la misma forma que lo hizo con su ropa, acaba de morir. Pero no puede ir a despedirlo…
         Maldice su estrella una y otra vez. Jamás lo poseyó del todo. Él nunca estuvo a su lado en las fechas más importantes de su existencia. Pero cuando lo estuvo… La sacó de su gaveta como una marioneta inerte y le dio vida. Movió sus hilos y la hizo danzar al son de su sonrisa.
         Hoy todo es pasado. Un pasado cercano y feliz que se eclipsa tras las sombras de un presente cruel. Quiere tomar valor para asistir al velatorio. Desea darle un beso en la frente, acariciar sus mejillas y susurrarle un adiós al oído. Pero… ¿Ocupando qué lugar entre los deudos? ¿El de una amiga ignota para su familia? Tampoco quiere mancillar la reputación del extinto. Siente que es una injusticia tener que esconderse, como siempre lo hizo, y llora su doloroso secreto.
         Él fue más que un amante. Con algunos años más que ella le brindó consejos, contención y optimismo. Llenó su vida a cuentagotas, bajo la promesa de estar definitivamente juntos algún día.
         De pronto, ella intuye que ese día llegó. Está decidida a llevar a cabo su parte. Ya siente la gélida hoja de acero punzando su vientre. Pero no teme. Sabe que no está más fría que su cuerpo. Ese cuerpo que se retuerce por un instante para entibiarse, luego, con el rojo manantial. Rápidamente el dolor físico se lleva consigo el malestar anímico, hasta desaparecer ambos a la vez.
         Ahora sí puede ingresar a la poblada sala y escabullirse entre la multitud. Luego se arrima al féretro y roza con sus labios los labios de su hombre. Él despierta de su breve letargo y abandona de un brinco el inmaculado lecho. A nadie más que a ella esperaba en el recinto. Vuelven a abrazarse y besarse como tantas veces lo hicieron, pero esta vez sin ocultarse. Luego, como dos níveas palomas, inician juntos el vuelo.
         Cuando están por atravesar el techo, la joven se disculpa y vira hacia el sector principal de la sala. Suspendida en el aire se acerca a la compungida viuda. La mira fijamente. Una sonrisa mordaz y triunfal se escapa de su lozano rostro. Luego retorna raudamente hacia donde la espera su amado para perderse, juntos, en la eternidad.
         Un convidado, recién llegado al velorio, se acerca al cajón. Observa el cuerpo del finado y murmura en baja voz…
         “Pobre... ¡Pasó a mejor vida!”

Jorge Emilio Bossa

Mención de Honor Género Narrativa
XLVI  Concurso Internacional
Instituto Cultural Latinoamericano
“La importancia de la Palabra
Junín (Bs.As.), Junio de 2015



viernes, 12 de junio de 2015

Día del escritor


            El día del escritor. De la imaginación. De sueños expresados en letras.

            Sentado en un banco de
una plaza, en un café céntrico o apartado del bullicio mundano, recuerdo a un escritor de nuestra ciudad, inspirador de mi deseo por escribir también cuando leí su libro “Barrilete”. Don “Tito” Lamberti, habitante de nuestra ciudad de San Francisco desde hace muchísimos años, redactor de miles de semblanzas aleccionadoras en el pizarrón central del patio descubierto del colegio “Sanmartiniano”.

            A este personaje risueño, lo imaginé muchas veces sentado frente a una máquina de escribir o en frías noches con lapicera en mano, o una tiza, llenando un papel de historias, de aforismos, de ensayos, de ironías antes las hipocresías de todas las épocas, de punzante mirada sobre la vida cotidiana y a la vez me decía, este hombre capaz de estar contemplando un barrilete trepar los aires entre pájaros de colores, toda esa figura me hizo observar la musa inspiradora de Julio Cortázar.

            Y ellos, ignotos y famosos como muchos miles en la Tierra son escritores, de calibres insospechados y tienen la bendición de serlo.

            Escribir. Un quehacer impresionante, increíble. Los escritores de novelas capaces de transportarnos a mundos increíbles en esas mezclas de realidad y ficción a la que nos llevan. Son los que uno cree junto a los poetas los más creativos, los que además de escribir, vuelan, imaginan y otros con la paciencia y la entrega diaria de investigar hasta extremos inimaginables una vida…

            La de un héroe, la de una mujer inimaginable, la de una guerra, la de una nación, la biografía de alguien, la vida de un país. Escritores capaces de escribir cuentos para niños desde hace centurias y que los pibes aún hoy abren sus ojos maravillados cuando la imaginación corre por sus mentes.

            Autores de libros que han llevado sus historias al cine, convirtiéndose en éxitos después que apareció una película y que a veces la gente disfruta sin conocer que esos escritos se llevaron a cabo durante semanas y meses.

            Hoy en la Argentina, por la gracia de la existencia de un cordobés, se festeja cada 13 de junio el “Día del Escritor” Los autores de libros de deportes abundan en ejemplos para aquellos que sabemos lo que en una calle o en una cancha de potrero, es la vida.

            Maestros de literatura que han juntado escrituras para delicia de todas las generaciones.

Recordando en este día el accidente de Leopoldo Lugones, cordobés de Villa de María, celebramos como decía, el día del escritor. A esta hora del día, que con una generosa e inteligente habitualidad, en el Taller de Literatura “Letras y Sonidos” se cuentan y se leen inestimables trabajos de amor, espiritualidad, sueños, cuentos cortos, escrituras épicas y lecturas de autores famosos. A Myriam y Beatriz, con mentes capaces de transportarnos en los tiempos, es bueno recordarlas en sus sapiencias educadoras.
           
Nos llevan por horas a todos los concurrentes a mundos fantásticos, a disensos calificados, intercambio cultural que transforma a quienes somos unos privilegiados de estar en ese taller mágico. También nos recomiendan qué leer, abriéndonos las mentes a ilusiones y verdades donde el sueño en muchas ocasiones nos vence y dejamos en la mesita de luz, para reencontramos recién al otro día.
           
Los poemas de Bécquer o Neruda, que nos sirvieron para reglar y a rimar en nuestras adolescencias, aventuras de todo tipo modernas y las de Sandokán muchos años atrás para apasionarnos con andanzas sensacionales, la sensibilidad del Principito o Juan Salvador Gaviota, mi Planta Naranja Lima y Rayuela.
           
Títulos, autores y escritores con sus obras. Hoy, en su día en la República Argentina por Lugones y en el aniversario de la muerte de Jorge Luis Borges el 14 de junio.
           
Los escritores. Aplaudimos tantos pensamientos impresos. Tanta imaginación. Y también saludamos a los miles de escritores que nunca publicaron sus libros, los que guardaron sus cuadernos y cientos de páginas escritas con poesías, cuentos, nostalgias, novelas, investigaciones pues no tuvieron posibilidades de ver sus obras hechas libros.
           
A la par, cierto, hay muchos impresos que producen calambre, pero el bolsillo todo lo puede, hasta negarle un libro a un escritor y darle a un inepto la posibilidad de imprimir escritos por solo tener dinero.

Por todo ello mi inspiración nació sentado en un banco de una plaza seguramente pensando en la próxima obra que escribiré, a la cual desentrañaré desde lo más profundo de mi ser, con sentimientos puros y leales a mis principios y a las tradiciones.
           
Feliz día del escritor.

Raúl Rodriguez Olezza
13 de Junio de 2015

Fiestas de Junio


ADELANTAMOS LOS FESTEJOS POR EL DÍA DE LA BANDERA (CON DONACIÓN DE LA INSIGNIA PATRIA A “LA CASA DE LOS ARTISTAS”) Y EL DÍA DEL ESCRITOR (CON TORTAS, MERENGUES Y BOMBONES)…











miércoles, 10 de junio de 2015

"Prof. Oscar Grandov" 2015


ENTREGA DE PREMIOS DEL CERTAMEN LITERARIO "PROF. OSCAR GRANDOV" - SAN GENARO (STA. FE), 5 DE JUNIO DE 2015...